
¡El pan de jengibre, uno de los sabores indispensables de los fríos días de invierno, es una excelente opción para llenar tus cocinas de olores fragantes! El sabor único y aromático del jengibre añade un sabor distintivo a esta receta y al mismo tiempo llena tu hogar con una atmósfera cálida. ¿Qué tal preparar unas cálidas y deliciosas galletas de jengibre con esta receta, que ofrece una deliciosa alternativa para los amantes de las galletas?
MATERIALES
- 2 tazas de harina
- 1 cucharadita de jengibre en polvo
- 1 cucharadita de canela
- 1 cucharaditas de levadura en polvo
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/4 cucharadita de clavo en polvo (opcional)
- 1/2 taza de azúcar granulada
- 1/2 taza de azúcar morena
- 115 gramos de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 1 huevos
- 1/4 taza de melaza
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
FABRICACIÓN
- En primer lugar, mezcle bien la harina, el jengibre en polvo, la canela, el polvo para hornear, la sal y, opcionalmente, los clavos en polvo en un tazón grande.
- Batir la mantequilla a temperatura ambiente en un tazón aparte hasta que alcance una consistencia cremosa. Luego, agrega el azúcar granulada y el azúcar moreno y continúa batiendo hasta que el azúcar se disuelva por completo.
- Agrega el huevo, la melaza y el extracto de vainilla. Mezclar bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea.
- Agrega lentamente los ingredientes secos a la mezcla y amasa hasta obtener una masa suave.
- Envolver la masa en film estirable y dejar reposar en el frigorífico durante al menos 30 minutos. Este paso ayuda a que tus galletas tomen una mejor forma.
- Precalienta el horno a 175°C. De la masa reposada coger trozos del tamaño de una nuez y enrollarlos.
- Cubre las bolitas de masa que preparaste con azúcar granulada y colócalas en una bandeja para horno forrada con papel de horno, espaciadas entre sí.
- Hornee en el horno precalentado durante 10-12 minutos, hasta que los bordes de las galletas estén ligeramente dorados.
- Después de sacarlas del horno, deja que las galletas se enfríen un poco y ¡disfrútalas!